Después de las aberraciones sucesivas de este personaje, la Sra. Calvo, no se observan  opiniones relevantes de los diferentes partidos políticos. Únicamente retazos periodísticos se han leído y escuchado, demasiado poco, para tanta desconsideración y menosprecio hacia todos, sobre todo una falta de respeto a la democracia. 

 En la actualidad la clase política, en todos sus aspectos, está muy deteriorada por la opinión pública. ¿Por qué? El ciudadano se está dando cuenta, incluido los afiliados a los distintos partidos políticos, que ellos están por encima de los demás y no se ve ningún cambio positivo que mejore u optimice la situación en el plano económico, político, social y cultural de nuestro país.

A través de los años y con distintos gobiernos, notamos que no ha habido avance en España, más bien un retroceso en todos los aspectos antes mencionados: No ha existido progreso, estamos estancado y el tiempo pasa; inundación de “pactos”, y en la actualidad el Gobierno que se forme, con una minoría en ciernes, no conduce a la estabilidad política de la ciudadanía y seguiremos más de lo mismo.  

No se puede olvidar, ni se debe, y más bien repetir, la última necedad de la vicepresidenta del Gobierno en funciones, manifestó la patrimonialización del feminismo: “El feminismo se inició con el socialismo. Es de todas, no bonita, lo hemos trabajado desde nuestro punto ideológico”; y se queda tan feliz. Su “jefe” Sánchez, se habrá quedado “pasmao”, digo yo. Esta mujer con Zapatero, está visto que aprendió poco y según parece el feminismo va a depender de la ideología. Absurdo.

Todo va a seguir igual o peor si no existe una modificación de la ley electoral, ya envejecida y que no se quiere  reformar. Por ejemplo, una segunda vuelta electoral, es decir que salga la formación que tanga más de la mitad de los votos emitidos, como se realiza en otros estados como sucede en Francia.

“Salvemos a Carmen Calvo. Hay que conservarla, aunque sea en un laboratorio, ya que existen pocos especímenes en la fauna política que la superen en meter la pata”, escribe  en el ABC, en la sección de Opinión, Manuel Contreras. La verdad es que esta mujer no tiene desperdicio y se puede escribir una novela, pero de “terror”. Cuál será su próximo órdago.