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En el periodismo  se objetivan algunos comentaristas, pocos en general, que no son  válidos y que son de  poca utilidad para la  profesión,  que se mueven de acuerdo con las prestaciones que le son ofertadas.

En reiteradas ocasiones escucho en “Las mañanas de RNE”, a Cristina Luna que más que opinar, parece “un gallo de pelea”, bueno en este caso una gallina. No es capaz de establecer un diálogo, carece de rigor y veracidad,  y sobre todo, cuando contesta,  parece enfadada, como no podría ser de otra manera, estando en desacuerdo con cualquier opinión del contertulio de turno. Todo esto  se está constatando en los tiempos políticos que estamos viviendo. Estas personas dejan en mal lugar al periodismo.

Comentando sobre la formación de Gobierno, estamos ante situaciones que no refleja lo refrendado en las urnas. Parece más bien un “convenio” entre políticos, dejando al margen la opinión de la ciudadanía. Parece poco ortodoxo.

Antes de la democracia el PSOE era el eterno desconocido. Cuando llegó por primera vez al Gobierno, con Felipe González, se fue entendiendo, y después con Zapatero, se extrae la conclusión final. No era una panacea, se trataba de un “híbrido” de la izquierda. Nada de centro izquierda, sino un sillón en el que se acomoda el primer organigrama que  esté confabulado en contra de la derecha. Ahora, se ha llegado al punto final. Pedro Sánchez, cede o regala cuatro senadores socialistas a ERC y Democrácia i Llibertat, además de estar meditando  buscar coalición con Podemos, si retrasa su pasión por los separatistas catalanes. Se evidencia que el colofón es que le faciliten el camino hacia La Moncloa.

No es posible tener un presidente, que se niega a dialogar. Ejemplo, Sánchez con Rajoy. “No y no”, palabras textuales de secretario socialista, como si fuera un niño chico, lo que demuestra el contexto en que se movería como futuro presidente.

No se puede consentir: “Hasta aquí hemos llegado”, como le dijo Rajoy al ignorante Pedro Sánchez. La ciudadanía española va a exclamar lo mismo, si los políticos no cambian de actitud. Todo tiene un límite. El ser humano cuando le quitas su “mediocre” bienestar, pone en marcha el  instinto de subsistir.

Referente a la interpretación del Rey: “nos veremos pronto”, a los primeros parlamentarios recibidos, no quiere decir que se vaya a una segunda votación, igualmente se puede entender,  que se verán en la formación del futuro Gobierno.

Siguiendo con el tema de la comunicación,  a  excepción de buenos profesionales, que todos sabemos sus nombres, más inteligentes, el resto son “euristas”, lástima,  porque son un eslabón importante, que aportan para no destrozar nuestro país.  “Ha perdido el R. Vallecano contra el Atlético de Madrid, ante un equipo mucho y más  importante”,  escuchado en RNE en Carrusel Deportivo. Mide la escasa formación de algunos comentaristas.

Desde el punto de vista de la ciencia en España seguiremos igual. Mientras los que se hacen llamar de “izquierdas”, no adquieran algo de mentalidad del saber, seguiremos igual por mucho tiempo. Es crucial inmiscuirse en estos problemas, para que entre todos vivamos en paz y sobre todo con otra mentalidad  de futuro. 

 

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