Como en España existen tantos expertos, según  ellos, hay  que saber actuar en cada momento o circunstancias. Cuando vienen las borrascas o tormentas, de agua o de nieve, se avisa hasta la extenuación y el aburrimiento por todos los medios informativos leídos o audiovisuales. Se puede decir, que en la televisión nos bombardean sin temor a equivocarnos.  Sin embargo, la ciudadanía hace caso omiso y se pone en carretera por vías más cómodas, como son las de peaje, lógico, pero en  este caso la AP-6 era  poco accesible por la cantidad de vehículos que circulaban, ya que no se buscaban vías alternativas.

 Asimismo, se meten en carretera sin cadenas, y los que la tienen, la mayoría no saben utilizarlas. Igualmente, se cometieron otras negligencias como inundar el carril izquierdo, lo que impidió  la actuación de las máquinas quitanieves y otros medios asistenciales. Aquí  surge el problema fundamental, del que no se dice nada, aunque los cargos públicos y Gobierno  también tienen su falta o error por no saber unificar criterio de los varios estamentos.

Otro motivo para comentar, es que cuando la climatología se pone agresiva no hay ser humano que la detenga, ni suficientes medios técnicos para solucionar el contratiempo. Si no, que se lo pregunten a los americanos, por ejemplo con los tornados. ¿Cuántos muertos se llevan? ¿No tienen suficientes medios para evitarlo? Sí, pero es imposible, lo único que se puede hacer es que éste cause el menor número de víctimas mortales. Aquí cuántas víctimas mortales ha habido. Ninguna. Pero el abogado de turno, implicado en el suceso por su mala previsión, quiere que con 150 o 1000€ restituir el daño moral. Seremos ineptos toda la vida.

Se ha querido implicar a la Guardia Civil, argumento absurdo. Los mismos conductores con su inoperancia y torpeza,  impidieron su llegada y dio comienzo el ataque a través de las redes sociales. El pueblo español está todavía falto de cultura. Para rematar la faena, entra en escenario el periodismo, que por lo que comentan, poco o nada saben  de lo sucedido y  opinan sobre el “desastre” desde su punto de vista ideológico, sin preocuparse de trasladar a la ciudadanía tranquilidad o serenidad.

Lo que sí fue nefasto es la actuación de la concesionaria de la autopista perteneciente a una filial del grupo Abertis, que no prestó la atención necesaria respecto al dejar pasar a los conductores. Como siempre la oposición encuentra otro filón de oro para responsabilizar al Gobierno y pedir dimisiones. ¿Cuántos  años llevan los opositores a Rajoy para desbancarlo del poder? Es una pena que todos unidos no tengan la suficiente fuerza para ello, lo que demuestra la mala praxis política de la que adolecen.